La relación entre Pedro Peña y Julio León se dañó a finales de 2010 y desde entonces entró en un proceso de desgaste irreversible. Peña, quien ha sido como la cara de Deportivo Cuenca en casi década y media, ha dejado la gerencia del club tras 14 años de gestión. Pero él tiene algo fijo en mente: volver.
¿Tuvo algún problema con el presidente Fernando Muñoz?
¿Y con Julio León? En algún momento tuvimos algunos desacuerdos, cosas que prefiero dejarlas ahí porque son situaciones de carácter netamente laboral. Ha dicho que quiere regresar y ha abierto una puerta para terciar en futuras elecciones. He recibido llamadas de mucha gente vinculada al fútbol que me ha dicho para armar desde ya un proyecto; es un poco temprano para hablar de eso, pero se puede pensar en hacer un grupo de trabajo que en su momento esté plenamente desarrollado.
¿Se va bien? ¿Se va como hubiera querido irse? Estoy tratando de irme de la mejor manera, por la misma puerta por la que llegué. No me voy del todo satisfecho, no me voy con la satisfacción con la que uno puede salir de un lugar. Creo que de alguna manera un poco injusta por la situación que se vivió este último año.
¿Por qué injusta? Por situaciones que se dieron netamente en algún momento; hasta se entró un poquito en el plano personal, una situación que poco a poco fue desgastando la relación.
¿Hubo una pugna de poderes? No. He tenido muchos presidentes, y he sido siempre muy respetuoso. He apoyado siempre, pero las decisiones finales las toma el presidente y el directorio.
Pero la convivencia se tornó difícil, ¿cuándo se dañó la relación con León? En el 2010, pero en el último año fue definitivo; a finales del 2010 empezó a cambiar la situación, se empezó a complicar.
¿No se hablaban? Lo necesario, no hubo una pugna de poderes, pero la situación pasó a otro plano.
¿Por eso se va del club? En cierta parte sí
¿Se va por la puerta por la que quiere irse, por la que llegó? Es la puerta por la que entré y por la que quiero volver a entrar en algún momento.
¿Le gusta el equipo que se armó? Independientemente de que me guste o no, lo que quiero es que el equipo funcione en la cancha. Yo soy hincha del Cuenca y siempre voy a estar. Tengo tres espacios en el palco 90, 91 y 92, y siempre voy a estar como estuve cuando fui hincha, en una barra y como gerente.
¿Esos espacios en el palco los compró? (Sonríe) Claro, los compré. Tengo el carné de socio desde que empecé como gerente; tengo los carnés que han sido descontados desde el rol de pagos, comprados, así ponga.
